Infancia en paz y en guerra

Serious reader 1930s Arissa

Antoni Arissa (Barcelona 1900-1980). Retrato de su hija leyendo. 1932.

Centelles 1937 niños jugando a fusilar

Agustí Centelles (Valencia 1909-Barcelona 1985). Niños jugando a fusilar durante la Guerra Civil Española. 1937.

 

En la infantil esperanza de un mundo donde con cualquiera con una cámara pueda fotografiar a muchos niños y niñas leyendo y donde nadie con una cámara tenga que fotografiar juegos de niños y niñas jugando a matar porque imitan lo que ven, y donde no olvidemos lo que fuimos y por lo que sufrimos y no pasemos de largo como si no fuera con nosotros la situación de quienes sufren ahora por lo mismo que hemos tenido que sufrir nosotros muchas veces a lo largo de la Historia, firma este ingenuo post en la ingenua creencia de que todos los días deberían ser el #DíaMundialDeLosRefugiados y que no solo habría que acordarse de ellos para usar el hashtag en un tuit ese día,

Verónica del Carpio Fiestas

anfisbena5 para firma

Avercamp

Son tan plácidos los paisajes invernales de Hendrick Avercamp, en Holanda, en el siglo XVII. Las ramas desnudas en los árboles curvos.

Averkamp

Y pueden serlo quizá también los paisajes de Madrid, en el siglo XXI.

WP_20151218_031 (2) 1

WP_20151218_027

WP_20151217_012 (2) 1

Verónica del Carpio Fiestas,

que ha hecho estas fotos

 

Cochinillos fotográficos o cómo nos ven desde el extranjero

Es legendaria la belleza de las fotografías de National Geographic. La interminable lista de fotos de referencia abarca personas, paisajes, animales, Arte y cosas y situaciones, y muchas fotos son obras maestras. Todo un mundo, todo el mundo, todo el Planeta, está ahí. Desde personas y Naturaleza en general a ritos religiosos, desde denuncia implícita en contrastes de pobres y ricos a juegos de luz y sombra o de colores y formas por pura búsqueda de belleza y sin afán de denuncia y hasta las explosiones atómicas y las expediciones al Polo y a la luna. ¿A que le viene a la memoria la bellísima foto de la joven refugiada afgana, de ojos verdes?

Desde el punto de vista paisajístico, de Naturaleza y etnográfico-documental lo mejor, lo más completo, lo más representativo, está ahí en fotos además de una belleza formal indiscutible. ¿No?

Pues a lo mejor no. Veamos.

Si estuviera en mano de usted comisariar una exposición antológica para celebrar los cien años del National Geographic, con ánimo de abarcar todo el Mundo, una amplia gama de temas y las más hermosas y significativas fotografías, ¿qué fotos referentes a España escogería, en el entendido de que nada le impide no incluir ninguna foto de un país, o incluir más de una?

En Estados Unidos, en el año 1988, la Corcoran Gallery, al parecer uno de los más antiguo museos de Estados Unidos, con obras de Rembrandt y de los impresionistas, y de referencia en fotografía, o sea, una institución por lo visto muy seria -que por cierto, vaya, resulta que cerró hace poco-, tuvo acceso a los archivos completos del National Geographic desde 1870, para organizar la exposición «Odyssey, the Art of Photography at National Geographic» con un catálogo con esta portada:

1

Y publicado el catálogo como lujoso libro, que aún puede encontrarse para su compra en Internet, y con fotografías sueltas también fácilmente localizables en abierto, con unas fotografías que quitan el aliento, Arte incluso en el dolor, la muerte, la miseria y la guerra, y temática espectacular, dura o neutra, entre ESAS fotografías, héteme aquí, oh, sorpresa, que la única fotografía que se refiere a España es ESTA:

Mazzatenta 1

Se trata de una fotografía del fotógrafo O.L. Mazzatenta. El mismo fotógrafo que fotografió para el National Geographic las excavaciones de las estatuas de los guerreros de terracota en China, las víctimas de antiguas erupciones volcánicas del Vesubio o la restauración de la Capilla Sixtina. Ahí es nada.

La fotografía es descrita en el catálogo en los siguentes términos:

O.I. Mazzatenta

Madrid, Spain, 1985

Window display in the 260-year-old Casa Botín restaurant -a favorite of American writer Ernest Hemingway-announcing the house speciality, roast sucking pig. Published February 1986, «Madrid: The Changing of Spain»

De todo el catálogo, que abarca 289 fotografías, es sin ninguna duda la fotografia estéticamente más fea, y no solo eso,  y muchísimo peor: la única carente de dignidad. Porque las muchas fotos de miseria, tortura, enfermedad, hambruna, muerte,  con temas durísimos, tienen una profunda dignidad, y belleza, y también las de cosas  o situaciones simplemente curiosas o pintorescas o neutras. Esta de unos cochinillos muertos en el escaparate de un restaurante, con una hoja de lechuga en la boca, como reclamo publicitario, no solo carece de belleza fotográfica, sino de dignidad como tema y enfoque.

Y, por cierto, ¿alguien llevó al fotógrafo a dar una vuelta por el barrio antiguo de Madrid y a comer a Botín, como es un clásico con los extranjeros con los que hay compromiso, o lo encontró él solito echando mano de cualquier guía para turistas? ¿Será que es así como se hacen los reportajes sobre un país? ¿Quedándose en la capital y yendo a comer a un restaurante que sale en todas las guías? Mejor pensar que no es así, porque da un poco de miedo. Uf.

De la lista de tópicos de la descripción de la fotografía, mejor ni hablamos. España y Hemingway. Ay.

Pero en fin, vayamos al fondo del asunto. Al fondo fotográfico del National Geographic.

De cien años de fotografías sobre todo el mundo, ¿cuántas sobre España habría en el fondo fotográfico del National Geographic? ¿Pintorescas, terribles, neutras? Incluyendo, que sé yo, sobre la miseria de Las Hurdes en los años 30 del siglo XX, la Guerra Civil, las procesiones, el arte románico, los sucesivos reyes y dictadores, las obras de Gaudí, las obras de Picasso, el Museo del Prado, los Pirineos, las muy variadas casas de pueblo, las muy variadas barbaridades que hemos vivido, las tristezas y las alegrías de las gentes o si me apuran los sanfermines y hasta las corridas de toros? ¿Tres? ¿Siete? ¿O quinientas? ¿Y cuántos reportajes habrá habido sobre nuestro país en el National Geographic?

Pues sean tres, siete o quinientas las fotografías del fondo fotográfico, y sean decenas o contados los reportajes, resulta que se ha escogido, y queda, para representar cien años de un país, para los anales, una foto de 1985 de unos cochinillos muertos con una hoja de lechuga en la boca, indigna y estéticamente fea más no poder.

Y en un país como Estados Unidos donde los conocimientos de Geografía más allá de sus fronteras por una amplia capa de la población suele considerarse que entran en lo nebuloso, donde quien más quien menos conoce casos de gente que cree que España está situada en Sudamérica y no en Europa, resulta que la única fotografía que unos serios comisarios de una muy seria institución cultural de una muy seria exposición antológica de los fondos fotográficos de la que en definitiva es una muy seria sociedad para la difusión de conocimientos geográficos inicialmente, ahora también científicos, arqueológicos, de patrimonio y más temas muy serios y profundos, si nos atenemos a la propia descripción de Wikipedia, han considerado oportuno incluir una fotografia de 1985 de unos cochinillos muertos con una hoja de lechuga en la boca, indigna y estéticamente fea más no poder.

¿Cómo será la información que de  nuestro país disponga la élite cultural, puesto que fue gente de esa élite cultural la que escogió esa foto? Y, por tanto, ¿cómo será la información de quienes NO son élite cultural?

Y una de dos: o tenemos muy mala suerte o la selección de fotografías sobre el resto de países es para ponerla en cuarentena.

O de tres. Tercera posibilidad, somos como nos ven:  Oink, el país de los cochinillos muertos con la hoja de lechuga en la boca.

Veronica del Carpio Fiestas